Nuestra blogger invitada Mariana (quien ya tuvo su participación en este post) se encuentra actualmente viviendo en Japón, así que imaginen lo bien que le hace a este blog lo que ella pueda contarnos.
Un fenómeno curioso que llamó su atención y la mía, es el llamado uchimata (内股); esto es, mujeres caminando con los pies chuecos a propósito.
No, si cuando digo que Japón es una tierra de misterios, no exagero.
A continuación pueden leer la investigación que hizo Marianette, ¡nuestra corresponsal exclusiva en Japón! 
¿Por qué tantas chicas Japonesas son, en su mayoría, chuecas?
Es fácil de identificar. La deformación de las piernas se ve a simple vista, y más aún si las señoritas usan una mini-mini pollerita de 15cm y unos tacos de 10. Si son señoras mayores, tambien se observa bastante.
Investigando en internet encontré que algunos especialistas se trataron de ocupar del tema, ya que era realmente alarmante la cantidad de chicas chuecas que había. Llegaron a pensar que era una cuestión nutricional por la dieta japonesa, mientras otros propusieron que se debía a la forma de sentarse, con las piernas juntitas apoyando la cola sobre los pies (seiza).
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| Posición seiza |
Lo cierto es que después de tanto debatir muchos se quedaron con la respuesta más obvia...¡porque es super-kawaii!!! (?)
Es significante que junto a chicas que caminan totalmente chuecas, aparecen otras perfectamente normales, ésto demuestra que para muchas ser chuecas es una elección, posiblemente un estilo de vida. Al parecer tener las piernas torcidas y caminar como una tarada es considerado como un rasgo sexy entre las mujeres japonesas y por lo tanto no merece la pena ser corregido. Las hace quedar más bonitas, inocentes, como si fueran nenas chiquitas que recién aprenden a caminar.
Es significante que junto a chicas que caminan totalmente chuecas, aparecen otras perfectamente normales, ésto demuestra que para muchas ser chuecas es una elección, posiblemente un estilo de vida. Al parecer tener las piernas torcidas y caminar como una tarada es considerado como un rasgo sexy entre las mujeres japonesas y por lo tanto no merece la pena ser corregido. Las hace quedar más bonitas, inocentes, como si fueran nenas chiquitas que recién aprenden a caminar.
En mi opinión queda espantoso. He visto mujeres caminando entre el barro y piedras con tacos (ya de por sí una tarea difícil) y encima, ¡chuecas! Una pasa del horror a la pena, porque parece que se van desarmando al caminar, algunas hasta me animaría a decir que necesitan un bastón.
¿Qué más lindo que unas piernas lindas, sanas y por sobre todo, derechitas?
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¡Gracias, Marianette!
